El “cuarenta y siete por ciento” de los electores norteamericanos decidieron que Barak H. Obama retuviera su oficina en la Casa Blanca. El contendiente Romney y sus “cincuenta y tres por ciento” fueron despedidos por insolentes; o, a lo mejor, los asesores de Romney le dieron las cifras equivocadas o él se equivocó de dígitos en el coctel en California y resulta que las “víctimas” que viven del gobierno no son “cuarenta y siete por ciento”, sino “cincuenta y tres por ciento”; en cualquier caso el desprecio por los pobres, los ancianos, los necesitados, las “fuerzas muertas”, los “improductivos” de la nación y su odio indisimulado hacia la comunidad latina lo sacaron del juego político y, de paso, los Estados Unidos evitaron una versión de George W. Bush, de infeliz memoria y peores consecuencias.
[Incidental] El futuro de la política de bloqueo contra el gobierno revolucionario y el pueblo cubano debe ser considerado teniendo en cuenta tres factores: la irracionalidad en el tema cubano de la clase política norteamericana, la prescindencia del mercado cubano para las corporaciones norteamericanas, y el impacto de la comunidad cubana del sur de la Florida en el diseño de la política exterior de este país hacia Cuba. El primero de los factores será modificado en la medida que la influencia cubano-americana se vuelva más consistente con los intereses del pueblo cubano y el factor ideológico ceda ante las realidades políticas y sociales, y cuando las corporaciones norteamericanas puedan participar en el mercado cubano sin restricciones financieras.
En el colegio electoral que vote localizado en Shenandoah Park había dos máquinas de votación para un total de 2,296 electores inscritos y una boleta de diez páginas. Aun así sólo demore un par de horas para votar. Lo hice porque quería salir de casa un poco y terminar una novela con título maoísta “I Curse the River of Time”. Además la hora era bella, el lugar también: eran sobre las cinco y media y atardecía, y era en el parque donde tantas veces lleve a jugar a mis hijos de pequeños.
El estado de la Florida siempre dando la nota en elecciones reñidas –el estado de las mafias, de la italiana, de la judía y de la cubana; el estado de los militares golpistas y torturadores del Plan Cóndor en América Latina durante los setentas. Entonces, no debe ser curioso que en el estado los políticos electos pugnen siempre por contar demasiado los votos democráticos –es que no están familiarizados con el procedimiento. No pueden creérselo, ¡que hayan perdido! No, si hicimos todo lo posible por que los “socialistas” se quedaran sin votar!
The “Cuban” County in figures:
Barak Obama Democrat 62.9 % 521,329
Mitt Romney GOP 37.7 % 317,382
Considerando que de los 712,567 electores hispanos registrados en el condado Miami-Dade 273,454 están registrados como republicanos y 218,399 como demócratas, la balanza del voto hacia el candidato del partido de gobierno la decidieron los electores independientes, 210,075. ¿Cuántos de ellos serán cubanos? ¿Cuántos cubanos republicanos habrán votado por el candidato demócrata?
La comunidad cubana del exilio histórico está desapareciendo y con ella el peso político que tradicionalmente dejo caer como un pesado puño de acero sobre sus discrepantes.
La comunidad cubana que emerge de sucesivas migraciones desde 1980 hasta la fecha está cambiando a posiciones más centristas y menos ideológicas, sin perder su identidad contrarrevolucionaria.
El centro de interés de la comunidad cubana se ha ido modificando: de una política aislacionista a una relación más fluida y efectiva con el país de origen.
¿Qué pasaría si se colocara un espejo frente a las tres últimas plecas, un espejo político? ¿Cómo quedarían redactadas?